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martes, 11 de agosto de 2015

Actos y manías que no te dejan vivir a plenitud.

Actos y manías que no te dejan vivir a plenitud.

La felicidad es cuestión de actitud. A continuación, que actos estropean tu sonrisa cada día. 
1. Olvida el pasado y el futuro, pero no olvides el presente. Vive el ‘aquí y ahora’, justo donde surgen las oportunidades para ser feliz. Muchas veces nos quedamos atrapados en el pasado, añorando lo que tuvimos, lo felices que fuimos; o por el contrario, estamos esperando a que termine el año para ponernos nuevas metas para tener aquello que tanto anhelamos y nos quedamos esperando el futuro. Ten presente que el tiempo perfecto para ser feliz está en el presente, como un obsequio contínuo para ser feliz. Recuerda y repítete esto, 'no tienes nada que buscar, ni nada que añorar y mucho menos que esperar', es ahora el momento ideal para sentirte feliz y bendecido. Solo en base a eso construirás un maravilloso futuro y una lista de magníficos recuerdos.
2. Deja de resistirte al cambio. A veces nos quejamos por las cosas que tenemos y las que no tenemos; y nos sentimos molestos e inconformes, desde la pasividadSi no estás conforme haz algo, no te quedes quito (a). Aferrarse a lo seguro no siempre es la mejor decisión en la vida. Puede que sientas miedo a lo nuevo u que la comodidad te haga resistirte a permanecer en el mismo lugar, en el mismo puesto u con la misma persona. Recuerda que si existe algo que nunca cambiará es precisamente el cambio. Si quieres que tu vida sea mejor, haz algo distinto a todo aquello que haces o has intentado.
3. Alto al auto saboteo. Ya dicen por ahí que no existe peor enemigo que uno mismo. Aunque no lo creas, los pensamientos negativos pueden contribuir a una nefasta realidad. Si todo el tiempo estás quejándote, lamentándote de lo que no tienes pues tu realidad es esa. Las personas felices asumen que la felicidad no es eterna y asumen las dificultades o las penas, pero jamás se quedan atrapadas en eso. Asumen el dolor, no se resisten a la tristeza y solo ven esta fase como una etapa que pasará y cambiará, pues saben que algo nuevo y bueno llegará a sus vidas. Ese pensamiento tiene un efecto poderoso en su vida ¡Inténtalo!
4. Deja de ser ingrato.  Valora cada cosa que llega a tu vida y las oportunidades que se abren ante ti, quizá no sea precisamente lo que esperabas, pero es parte de un camino que te ha obsequiado. Siempre sé agradecido, algo que no significa ser conformista o tener que humillarte ante los demás, por pequeñas cosas. Puede que no te guste a totalidad lo que tienes en tu presente, pero recuerda que alguien quisiera, si quiera, tener las oportunidades que rechazas o por las te quejas a diario.
5. Olvida las apariencias. Casi siempre estamos rodeados de apariencias e incluso el ser feliz se convierte en una apariencia dentro de tu vida. Pretendes hacerte creer que eres feliz con un auto del año pero estás solo y no lo dices, u que no sientes dolor para creerte un ser más integro y te engañas, al tener que guardar tus lágrimas. Pero debes recordar que precisamente uno de los retos más difíciles en nuestra vida es aceptar quiénes somos en realidad, con algerías y penas, sin importar el qué dirán.